Amanda y Eduarda |
Los doce jurados populares concluyeron que la fiscalía probó que Alves Ferreira fue el autor de un homicidio agravado por el uso de arma de fuego y cometido con alevosía. Sin embargo, entendieron que la fiscalía no demostró que se trató de un femicidio. Por eso, excluyeron ese agravante.
En consecuencia, se impuso parcialmente la teoría de la defensa que alegó que Amanda ya se autopercibía mujer cuando mató a la joven brasileña. Para la fiscalía, era una estrategia “para zafar” del agravante del femicidio.
EL VEREDICTO
El fiscal jefe Martín Lozada recordó que cuando había empezado la investigación se identificó como Fernando Alves Ferreira. De hecho, en la audiencia de formulación de cargos que se hizo dos días después del crimen dio esos datos al juez. El fiscal advirtió a los jurados que recién comunicó diez meses después del homicidio que se autopercibía mujer. Pero no logró convencer a los jurados.
Tampoco los defensores oficiales Nelson Vigueras y Mónica Goye convencieron al jurado con su pedido de declararla no culpable por inimputabilidad. Sostuvieron que al momento del crimen la imputada tuvo un trastorno mental transitorio que le impidió comprender y dirigir sus acciones.
En realidad, observadores del juicio sostuvieron que los jurados descartaron el femicidio pero no por la "autopercepción", sino porque no se probó el contexto de violencia de género.
El juez Martín Arroyo, de excelente desempeño en su primer juicio por jurados, instruyó expresamente al jurado acerca de este punto crucial: que para que haya femicidio, no sólo debe probarse que el autor es varón, sino también que existió un contexto de violencia de género previo. Cualquier observador neutral del juicio advirtió que tal cosa no se probó jamás.
Es decir, el jurado descartó el femicidio por otra vía muy distinta a lo solicitado por el fiscal.
Los doce jurados titulares ingresaron a las 20.45 a deliberar tras recibir las indicaciones del juez Juan Martín Arroyo, que dirigió el juicio. A las 23.20 se anunció que habían arribado a un veredicto y entraron a la sala de audiencias. En el aire se percibía la incertidumbre por una resolución.
Juez Martín Arroyo |
El presidente del jurado informó que el veredicto unánime era culpable del homicidio agravado por el uso de arma de fuego y cometido con alevosía. No dio más explicaciones. El jurado popular no tiene la obligación de explicar ni fundamentar su decisión. Todas sus deliberaciones son secretas.
Cuando escuchó el veredicto, la imputada no se inmutó. Se mantuvo serena como lo hizo durante todo el juicio por jurados, que empezó el lunes y finalizó esta noche con el veredicto de culpabilidad. Aún falta la segunda etapa donde se definirá la condena.
LOS HECHOS
Las dos jóvenes se habían conocido en su país natal, Brasil. Viajaron a Bariloche y Amanda (que entonces era Fernando) se casó en 2018 con Marcelo Ramírez. La pareja le propuso a Eduarda subrogar el vientre para ser padres. En el transcurso del embarazo, Ramírez murió en agosto del 2021.
En noviembre de ese año, Eduarda tuvo dos mellizos en el hospital Ramón Carrillo de Bariloche. Los nenes llevan el apellido de Alves Ferreira y de la madre. La joven regresó a su país, donde tenía otros tres hijos. Allá quedó embarazada. Le pidió ayuda a Alves Ferreira, que le propuso regresar a Bariloche con el bebé. Retornó y todos vivieron en el domicilio, que le dejó Ramírez a su esposo.
La fiscalía aseguró ante el jurado que Alves Ferreira planificó el crimen de Eduarda para poder disponer de los tres niños y regresar con ellos a su país. Manifestó que llevó a Eduarda la madrugada del 16 de febrero hasta el sendero de acceso al mirador del lago Escondido, donde le efectuó 9 disparos. Para lograrlo vació un cargador y volvió a cargar el tambor, que aloja hasta 6 proyectiles.
El dato no es menor. Para la fiscalía esa acción fue pensada y el autor lo hizo con plena conciencia y dispuesto a ejecutar su plan macabro. Destacó que así lo señalaron varios peritos que declararon en el juicio que comenzó el lunes en Bariloche.
El fiscal Martín Lozada, tras el veredicto |
La defensa alegaba que Amanda era inimputable
El defensor oficial Nelson Vigueras planteó esta tarde de viernes ante los jurados que la fiscalía no probó fuera de toda duda razonable la acusación.
Aseveró que no puede imponerse el agravante del femicidio cuando la acusada, Amanda, se autopercibe mujer. Es más, afirmó que se autopercibe mujer desde que era adolescente y explicó que así lo aseveraron una hermana de Amanda y una amiga de Brasil.
Descartó la violencia de género. Recordó que Eduarda se ofreció a subrogar el vientre para que su amiga Amanda y su esposo sean padres. Y enfatizó que no hubo una relación de poder asimétrica ni un homicidio causado por odio hacia Eduarda por su condición de mujer porque la acusada se autopercibe mujer.
Vigueras desestimó también la alevosía porque afirmó que la fiscalía no lo demostró con certeza. Y planteó que Amanda cuando ocurrió el homicidio sufrió un trastorno mental transitorio que le impidió comprender y dirigir sus acciones.
Dijo que así lo indicó en el juicio el psicólogo forense del Poder Judicial, Alfredo Fernícola, que entrevistó a Amanda a finales del 2022. Por eso, Vigueras pidió la declaración de no culpabilidad porque es inimputable.
Además, el jurado declaró por unanimidad culpable a Amanda por la portación de un arma de guerra de uso civil condicional sin la autorización legal necesaria.
Las instrucciones del juez
Leer noticias aquí:
- Diario Rìo Negro (1/7/23): "Bariloche: el jurado declaró culpable a Amanda por el homicidio de Eduarda, pero descartó el femicidio" (ver)
- Ámbito Financiero (1/7/23): "Declaran culpable por "homicidio" al ciudadano brasileño que se autopercibe mujer" (ver)
- Perfil (8//23): "Amanda, la criminal que se autopercibe mujer y sorteó el agravante de femicidio" (ver)