Jueza Romina Martini |
La deliberación del jurado popular del tercer juicio por jurados en Bariloche declaró culpable a un hombre acusado del delito de abuso sexual agravado cometidos en perjuicio de una niña.
El presidente del jurado informó la decisión tomada en la audiencia presidida por la jueza Romina Martini anoche, pasadas las 21:30. Habían deliberado un récord de ocho horas corridas.
Tras varias horas de deliberación, los jurados le informaron a la jueza que estaban estancados. No se podían poner de acuerdo de manera unánime sobre la culpabilidad del acusado, quien declaró negando tajantemente su autoría y defendiendo su inocencia.
Es la primera vez que el veredicto no fue unánime en Río Negro, lo que obligó a la jueza Martini, de destacada actuación en su primer juicio por jurados, a informarle al jurado que estaban autorizados a emitir un veredicto válido con 10 votos. De otra manera, el acusado debería ser absuelto y quedar en libertad.
Fue evidente que ciertas actitudes de los litigantes con el trato dispensado a los testigos más humildes que declararon en el debate cayó muy mal.
En todas partes del mundo sucede lo mismo: los jurados suelen hacer pagar muy caro las actitudes despectivas y altaneras de los actores judiciales. Por eso han comenzado a aparecer en las leyes argentinas, como las recientes de Chaco, CABA, Entre Ríos y Catamarca, las llamadas Reglas Éticas de la Abogacía (ver): "La segunda es que el artículo 33 de la ley de CABA (reglas éticas de la abogacía) es el inicio de un programa de capacitación a largo plazo de toda la abogacía y de los operadores judiciales tendiente a advertir un extremo evidente: en un juicio por jurados no se puede decir ni hacer cualquier cosa....".
A ello debió sumarse, además, las dudas que generaron la potente declaración en su defensa del acusado y a que los jurados suelen analizar toda la prueba con extremo detalle.
El jurado volvió a deliberar otra hora y media corrida y le anunció a la jueza el veredicto de culpabilidad con diez votos.
Por la fiscalía estuvieron Betiana Cendón y César Lanfranchi, la defensora del niño Victoria Allen y el abogado de la querella Martín Paterlini, en representación de la madre de la niña víctima. El acusado fue repesentado por el abogado particular Diego Navarro.
La jueza Martini ponderó la seriedad que demostraron a lo largo de todos los días del juicio. La magistrada agradeció en nombre del Poder Judicial y en nombre del pueblo la participación en este juicio. “No sólo es una carga pública, sino un privilegio”, resaltó.
El juicio por jurados se realizó a puertas cerradas, sin acceso a la prensa, por tratarse de un delito sexual que involucra a una menor de edad.
Leer noticias aquí:
- Diario Río Negro (3/12/21): "Por mayoría, el jurado popular definió que un hombre es culpable por abuso sexual en Bariloche" (ver)